San José, Costa Rica. Setiembre, 2018.

Que linda luces mi querida Costa Rica. Quiero decirte al oído que, te amamos y veneramos. Por mar, praderas y montañas te añoramos y al ritmo de tú viento musical te cantamos canciones de paz, amor, libertad, esperanzas y solidaridad.

Que linda te vemos nuestra patria querida, por eso al descubrirte los conquistadores, te pusieron por nombre Costa Rica.

En el mundo entero te admiran por tu paz, tu democracia y tu libertad, por tu tierra fértil y tu gente alegre pródiga en amistad.

Desde tus entrañas los nacionales te soñamos y amamos y los que como patria te han adoptado, de ti y tu gente se han enamorado, como si la tierra prometida hubiesen encontrado, huyendo de la guerra, la opresión, la persecución, el hambre, la falta de oportunidades o siguiendo un amor.

El color verde de tus bosques y montañas nos deleitan en las tardes y mañanas, llenando nuestros pulmones de oxígeno vital, fuente de vida humana y animal.

Tus ríos como el Tempisque y el Térraba, fuente de vida de nuestra flora, fauna y especie humana, se deleitan al recorrerte, entre valles y montañas, llevando consigo el secreto del éxito de tú gente, cual es, proteger tú medio ambiente, con inteligencia, creatividad y responsabilidad; disfrutando así de este paraíso terrenal, obra y regalo de la Creación Celestial.

El sol radiante que te ilumina es fuente de energía de tu exuberante y bella flora, extraordinaria fauna y del homo sapiens de la especie humana que te han habitado y te habitarán, para bien de la humanidad. Que ese sol siga alumbrándote como si siempre estuviera en el zenit, dando así, brillo y energía a las mentes de quienes te habiten, para que siempre tengamos la inteligencia emocional y el coeficiente intelectual que nos permita ser muy exitosos en el desarrollo económico y social.

Tú bella y hermosa luna ha sido fuente de inspiración permanente de tu pacífica, alegre y romántica gente, quienes se han beneficiado de tu luz amorosa y seductora.

El cielo azul que te cobija se mueve al ritmo de las olas de los dos mares que te abrazan, por el este y oeste, convirtiéndote en un portal de bellos celajes.

Somos felices al calor de tus entrañas, por eso gozamos tus bellas mañanas, la luz que te ilumina durante el día, tus bellos atardeceres, las románticas noches en sus anocheceres y la sinfonía de aves preciosas en tus refrescantes amaneceres.

Mi linda, amada y bendecida Costa Rica, jardín de flores de múltiples colores y aromáticos olores. Le pedimos al Ser Supremo que siempre brillen tu luna, el sol y las estrellas, para que los seres que te habitan te disfrutemos arrobados de la belleza de tú bandera, himno nacional, la guaria morada y los sentimientos de paz, democracia y libertad que, a tu gente ha caracterizado.

Oramos para que tus sueños oníricos nunca se conviertan en las pesadillas que a menudo ahogan en sangre a muchos pueblos en el mundo, quienes nunca han gozado de una paz duradera, por culpa de sus guerras intestinas, narcotráfico y la ambición de algunos de sus pobladores o del expansionismo de pueblos extranjeros perversos, crueles y usurpadores.

¿Cuántos desplazados de países lejanos y cercanos hemos recibido y dado cobijo? ¿Cuántos recibimos a diario y seguiremos recibiendo? Se cuentan y se contarán por miles, porque a pesar de ser pequeños en extensión tenemos un gran corazón, para abrazar a los inmigrantes sin preguntar de qué raza son ni religión, ni orientación sexual. Sin embargo, a pesar de nuestra apertura a veces nos han dicho xenofóbicos, pero eso no es nuestra realidad, lo que sucede es que nuestros recursos económicos son limitados no alcanzando la cobija para arropar a todos, cuando llegan a nuestra tierra buscando: comida, techo, amor y amistad.

Patria nuestra querida, con una oración de amor que verte desde lo más profundo de nuestros espíritus queremos decirte. “Nosotros siempre estaremos prestos a defenderte de fuerzas extrañas vestidas de drogas, armas y corrupción, quienes vengan a dañar las almas y corazones de tus humildes, labriegos sencillos y valientes pobladores”.

Te amamos Costa Rica. Con alma, vida y corazón te amamos. Gracias nuestra patria querida, por dar cobijo a quienes aquí hemos nacido y los que como patria te han escogido. Todos juntos como una familia te honramos, amamos y por ti oramos esperando siempre que del cielo lluevan no solo gotas de lluvia fresca y abundante, sino te inunden gotas llenas de bendiciones para que el jardín terrenal que representas siga siendo crisol de la humanidad de paz, libertad, democracia, hermandad y solidaridad.

Mi linda Costa Rica. Nuestra patria querida. En tu honor queremos recordar algunas frases bellas de nuestro himno nacional. “Conquistaron tus hijos eterno prestigio estima y honor” “Vivan siempre el trabajo y la paz”. Esperando que nuestras nuevas generaciones siempre honren el patriotismo de nuestros antepasados, impregnado en la letra sublime de nuestro himno nacional.

Doctor Solón Chavarría Aguilar.

Médico especialista en medicina interna
Expresidente del Colegio de Médicos y Cirujanos de Costa Rica.
Expresidente de las Asociación de Colegios de Médicos de Centro América.