Está diseñada para períodos cortos de tratamiento, observación, valoración y revaloración de pacientes. La mayoría de los pacientes son, inicialmente valorados, en el servicio de emergencias donde acuden por las primeras atenciones y de necesitar una estabilización de más horas pueden contar con este servicio de corta estancia. Esta posibilidad aumenta la eficiencia del flujo de pacientes entre el servicio de urgencias y la UCE, y para ello cumplen con los criterios de admisión.
Los pacientes reciben servicios de observación y tratamiento de alta calidad, al ser pacientes previamente seleccionados, en los servicios de emergencias, donde se determina que requieran continuar la atención por su problema de salud y del cual pueden recibir el alta en las 72 horas siguientes después del ingreso. Profesionales médicos y de enfermería monitorean constantemente el paciente para lograr eficiencia en el tratamiento y recuperar la salud. Las habitaciones están bien equipadas para proporcionar confort y cuidado de alta calidad al paciente, son compartidas con cómodas horas de visita para el acompañante.
El paciente que ingresa a la UCE tiene ya un diagnóstico, plan de observación y/o tratamiento y un alta claramente definida. Todo paciente debe cumplir con la prueba rápida de COVID para ingresar a las mismas. El procedimiento de ingreso a la Unidad de Corta Estancia se inicia cuando el médico determina que hay un paciente con las características requeridas para ello, se lo propone al paciente y con su consentimiento realiza el trámite de admisión. Inmediatamente se activa el traslado y el paciente es admitido en el servicio donde será tratado durante las 72 horas siguientes. La mayoría de estos pacientes mejoran su condición y son egresados antes de cumplir las 72 horas