San José, Costa Rica. Febrero, 2016.

El mayor problema de los trastornos auditivos se presenta en la comunicación. Por lo tanto, también conlleva problemas de interacción, sociales y afectivos.

Según Cinthia Azofeifa, audióloga del Hospital Clínica Bíblica, “una alteración audiométrica consiste en la disminución de la agudeza auditiva, que se evidencia con la baja de los umbrales de percepción de sonidos y dificultades en la comprensión del lenguaje en algunos casos”.

El padecimiento más común varía con la edad. En el caso de los lactantes e infantes, el problema común son las otitis medias serosas y la disfunción tubaria. En adolescentes y niños, un problema auditivo podría afectar la interacción con sus pares, padres y maestros. Por lo tanto, su rendimiento escolar también podría verse afectado, no solo por el hecho de no escuchar bien, sino por el alto porcentaje de ausentismo. En cuanto a adultos, se observan consultas por tinnitus y vértigo y, en el caso de adultos mayores, la pérdida auditiva se relaciona con el envejecimiento.

“Se podría decir que toda la población que cuenta con antecedentes familiares, otitis media recurrente o exposición a ruido, entre otros factores, se encuentra en riesgo de desarrollar pérdida del oído”, comentó la experta en audiología.

El diagnóstico se da por medio de la valoración médica y distintas pruebas audiológicas. Pero, de manera casera, cuando existe disminución auditiva se evidencia con problemas para sobrellevar una conversación o falta de atención.

El tratamiento depende del problema, y podría variar desde medicinas hasta prótesis auditiva. La prevención consiste en el chequeo anual médico y audiológico.

“Siempre es recomendable un chequeo anual de la audición y no esperar a que exista sordera, dolor o alguna otra manifestación física. Es importante la consulta médica ante el más mínimo cambio o molestia que presente la persona”, concluyó Azofeifa.

Otitis medias serosas: es la presencia de líquido espeso o pegajoso por detrás del tímpano en el oído medio sin infección.
Disfunción tubaria: sensación de oído tapado o dolor de oído.
Tinnitus: consiste en notar golpes o sonidos en el oído que no proceden de ninguna fuente externa.

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