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Guía de Soluciones de Salud (Blog)
San José, Costa Rica. Mayo, 2016.
“¿Por qué todo lo rico engorda?”, se preguntan muchos para quienes la tentación tiene aroma a chocolate. La fama del delicioso, pero alto en calorías, que ostenta este dulce capricho pone a más de uno a sufrir cada vez que intenta evadirlo en bien de su salud.
Sin embargo, el chocolate aporta beneficios siempre y cuando cumpla con algunos requisitos. Según explica Mauricio Quesada Carvajal, nutricionista del Hospital Clínica Bíblica, “muchas marcas comerciales utilizan una mínima cantidad de chocolate y lo hacen con mayor cantidad de grasa y azúcar, por lo que el valor calórico aumenta”.
Por lo tanto, es importante revisar la etiqueta antes de consentir el sentido del gusto. El truco es consumir chocolate con altas dosis de cacao. El negro es el más recomendable, puesto que contiene más de 50% de cacao e, incluso, si contiene más del 65% prácticamente no tiene azúcar.
Aquellos que se deben evitar son el chocolate blanco (que ni siquiera lleva cacao, solo manteca, azúcar, leche y otros ingredientes), así como los chocolates light que traigan quizás nada de azúcar, pero sí mucha grasa y viceversa.
¿Cuáles beneficios aporta el chocolate a nuestra salud?
Para comenzar, el chocolate no solo alegra el paladar, sino también el corazón. Tal y como lo explica el nutricionista, “el chocolate contiene flavonoides, que son los compuestos saludables que ayudan a reducir la presión sanguínea”. Asimismo, ayuda a prevenir enfermedades cardio y cerebrovasculares, ya que dilata las arterias.
Por otra parte, es rico en antioxidantes, los cuales protegen nuestras células del daño causado por los radicales libres, que son moléculas inestables de oxígeno que se consideran responsables del envejecimiento y de algunas enfermedades.
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Mito: no está comprobado que el chocolate cause espinillas, sobre todo el chocolate negro, que tiene menos manteca de cacao.
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Otra buena noticia es que ayuda a evitar la depresión, gracias a su contenido de anandamida, un compuesto químico que mejora el estado de ánimo y que favorece la producción de serotonina en nuestro cerebro, la cual actúa como un calmante natural. Y, como si fuera poco, ayuda a mejorar nuestras capacidades cognitivas, incluyendo la memoria, puesto que contiene teobromina, cafeína y feniletilamina, componentes que además aportan energía a nuestro cuerpo y nos ayudan a mantenernos alertas y concentrados en nuestra rutina diaria.
Asimismo, nutricionalmente el chocolate aporta grasas, hidratos de carbono y proteínas, vitaminas A y B y minerales como el calcio, fósforo, hierro, magnesio, cobre y potasio.
¿Quiénes deben cuidar su consumo de chocolate?
Según recalca Quesada, el chocolate debe ser consumido con moderación, en especial por aquellas personas con hígado graso, diabetes, sobrepeso y que no practican ejercicio. En esos casos, es necesario recibir orientación nutricional para conocer cuándo, cuánto y qué tipo de chocolate podría ser consumido o completamente restringido hasta haber controlado la enfermedad.
También es importante, como mencionábamos anteriormente, revisar las etiquetas de las marcas comerciales e inclinarse por el chocolate oscuro o el que se utiliza para hornear.
Así, se podrá disfrutar de este dulce capricho sin remordimientos.
Evite enfermedades infecciosas manteniendo hábitos higiénicos saludables como: lavado de manos, buena alimentación, ejercicio, controles periódicos con el médico, odontólogo, vacunación al día, no auto medicarse, mantener lugares de estancia limpios ordenados, frescos y recreación, entre otros.
Para mayor información, o para solicitar cita en cualquiera de las especialidades médicas, puede contactar al hospital privado Clínica Bíblica al teléfono 2522-1000, al correo electrónico contacto@clinicabiblica.com o vía chat en el sitio web: clinicabiblica.com.